Los ingresos de junio por regalías de Tarija llegaron a 44 millones de bolivianos, un 25% menor a lo proyectado como ingreso mínimo, es decir, 51 millones, según la gobernación que criticó a los asambleístas por aprobar leyes económicas, sin consultar al Ejecutivo.
En julio y agosto el bajón podría ser mayor, probablemente un 50% menor a lo programado, aunque se espera que no sea así, de acuerdo al Secretario de Economía de la Gobernación, Manuel Figueroa quien espera que los ingresos no sigan cayendo.
El funcionario también informó que previendo esta caída en los ingresos se redujeron drásticamente los gastos de funcionamiento y administración para orientar esos recursos para atender los problemas propios de la lucha contra el coronavirus.
La situación de la gobernación es muy complicada en la parte financiera, respondió ante consulta sobre el pedido de un bono universal para la gente sin ingresos. Cuestionó a la Asamblea sesionar virtualmente desde hace dos meses sin consultar al Ejecutivo para aprobar leyes.
No hay ninguna consulta formal a la gobernación sobre este pedido de bono, que vengan los asambleístas a informarse de la situación económica, a dialogar y buscar alternativas en conjunto, no es nomás aprobar leyes sin conocer las finanzas, siguió.
Otro aspecto cuestionado por Figueroa son los numerosos pedidos de información de varios asambleístas, que hasta parecen carentes de moral, porque para responder la gobernación tiene que mover personal en diferentes dependencias. “Me parece injusto que los asambleístas estén sesionando desde la comodidad de sus hogares por zoom u otras plataformas virtuales, obligándonos a responder sus preguntas, para evitar otras peticiones posteriores, sin darse la molestia de venir”, cuestionó.
No me parece, para nada coherente ese tipo de accionar, visite mi oficina voy a mostrarle la cantidad de peticiones de informe que hay y la cantidad de gente que debe movilizarse para responderlas, cada petición tiene un montón de preguntas. «Me gustaría que la Asamblea cruce la plaza principal para trabajar conjuntamente, acabamos de entregar camas para terapia intensiva en el hospital, ahí también tendrían que estar los asambleístas apoyando y estar en lugar de riesgo, trabajando como nosotros», insistió.
Sobre la nivelación salarial del sector salud con los del TNG cuesta 50 millones de bolivianos, la gobernación siempre tuvo ese propósito, sin embargo, antes de aprobar una ley por protagonismo político, hay que revisar los números. No estamos para condenar a una institución por un afán político, condenarla financieramente dejarla sin un peso para nada, hablamos de nuevo bono, de aumentar el Prosol para todas las comunidades, de nivelar al sector salud, pero no hablan de bajarse el sueldo, cuestionó.
«Cuando están por hablar de bajarse el sueldo, porque están sesionando desde sus cadas, hábilmente se pasan a otro tema», volvió a ironizar.
Fernando Barral Zegarra
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