La lavadora: más de un siglo al servicio de la humanidad

La lavadora ha cumplido más de un siglo de servicio a la humanidad.  Las marcas de lavadoras en la actualidad, superan los centenares.

En efecto; la primera lavadora fue inventada en 1901 por Alva Fisher, en el fulgor de los inventos producidos por la Revolución Industrial que cambió al mundo y lo introdujo en lo que ha venido a denominar “modernidad” donde podemos disfrutar de todos esos grandiosos inventos de hace más de un siglo, a raíz de la invención de la electricidad.

Una lavadora se hace fundamentalmente de un tambor que es movido en ambos sentidos por un motor. En el tambor se pone la ropa sucia y el motor hace que éste gire en un sentido y después de unos segundos, gire en sentido contrario, logrando de esa manera que la ropa al interior del tambor, su pueda “refregar” en medio de agua caliente mezclada con detergente para lavar ropa.

El siguiente momento y luego de varios minutos de este refriegue y cuando el agua ya está sucia, una bomba de agua se ocupa de succionar toda el agua del tambor y expulsarla a una cañería de desague.

Luego se repite la misma operación, pero esta vez con agua sin detergente para el respectivo enjuague.

Finalmente se produce el centrifugado del tambor para sacar toda el agua de la ropa y dejarla lista para ser colgada para que seque al aire.

Algunas lavadoras modernas poseen también un dispositivo de secado de la ropa, donde siguiendo el principio del tambor (pero más grande), se introduce en el la ropa húmeda, pero en lugar de meter agua en el tambor, la secadora de ropa (así se llama) introduce aire caliente para que la ropa pueda secar al girar de un lado para otro dentro del tambor.

Si embargo, esta operación puede resultar perjudicial para prendas de vestir de materiales especiales como la lana de alpaca y similares.

Si bien es cierto que las lavadoras son más comunes en un “formato familiar”, también existen en tamaño industrial que se usan especialmente en hospitales y otros centros donde se tiene que efectuar el lavado de manera masiva.

A estas alturas del siglo XXI la lavadora ha pasado a ser un artículo de primera necesidad en los hogares de la sociedades denominadas modernas.