La recuperación económica en la Costa del Sol se percibe notablemente en el turismo y la construcción

Este año, la recuperación económica mundial se ha venido dando paso a paso, lenta, pero de forma sostenida en todos los sectores, lo cual se puede evidenciar con mucha fuerza en la construcción y el turismo, que por ejemplo, en la Costa del Sol están dando buenos indicios a favor de un sano restablecimiento de las condiciones perdidas.

Nadie podría haber imaginado que una pandemia como la que vivimos con la Covid-19 pudiera presentarse, ni mucho menos los estragos que en todos los ámbitos ha generado, como el económico, que es el que más ha sufrido.

Durante casi un año, sectores económicos como el transporte, importaciones y exportaciones, comercio en general, turismo, alquiler de inmuebles y la construcción, han estado prácticamente paralizados, llevando a todas las empresas del sector al borde de la bancarrota.

Afortunadamente, este año las cosas comienzan a cambiar, gracias a la flexibilización de las restricciones sanitarias, las vacunas, la implementación de efectivas medidas de seguridad y al claro conocimiento que ya se tiene de la enfermedad. Las actividades económicas comienzan a retomar su brillo en esta nueva realidad, con mucha fuerza y esperanza.

Por eso vemos que regiones como la Costa del Sol, empiezan a despertar y a retomar progresivamente su ritmo económico. Un indicio de esto, por ejemplo, es ver cómo las estructuras de hormigón en Málaga nuevamente vuelven a ser habituales y las construcciones comienzan a formar parte del paisaje otra vez.

Y es que esta pujante región española se ha caracterizado en los últimos tiempos por el auge del turismo y de la construcción, que ya empiezan a dar signos de una franca y sostenida recuperación económica, como muestra de lo que sucede en España y en el mundo entero.

La construcción retoma su camino

En la Costa del Sol, la construcción estuvo parada durante largos meses, no se colocó ni un solo bloque durante casi un año, pero eso ya está cambiando y nuevamente se puede ver en el fuerte movimiento de compañías, técnicos y personas que están construyendo en todas partes de la región.

Las empresas constructoras ya están casi al 100% elaborando proyectos, plasmando ideas y cambiando la imagen de todos los lugares, con obras que están aportando una dinámica distinta a la economía, generando empleos y ganancias para todos.

Se puede ver claramente que la tendencia en la Costa del Sol es hacia un marcado restablecimiento económico que, al parecer, apunta a estar mejor que antes de la llegada de la pandemia. En el ámbito económico es normal, que tras tiempos de recesión, haya un fuerte empujón hacia períodos más estables.

Y hablando de construcción, las estructuras de hormigón armado en edificios comerciales, viviendas unifamiliares, bloques de edificios, naves industriales y más infraestructuras públicas y privadas, vuelven a tomar fuerza.

El hormigón armado es por excelencia el material preferido para la construcción, y las empresas que trabajan con él ya están otra vez operando. Solo basta con revisar las opciones que se pueden encontrar en internet para solicitar sus servicios y poner a desarrollar cualquier proyecto.

La administración de fincas también se reactiva

Con el restablecimiento de diversos sectores económicos, principalmente el turismo y la construcción, algunas actividades como la administración de fincas en Marbella, que también se había paralizado parcialmente, nuevamente comienzan a activarse.

Estas propiedades, muchas de ellas destinadas al turismo, que durante meses estuvieron desocupadas, otra vez son solicitadas por familias que quieren pasar sus vacaciones en Marbella después de pasar tantos meses encerrados. 

En esto, las empresas administradoras son expertas y ayudan a los propietarios a poner en alquiler sus inmuebles, para estar listos ante la ola de turistas que están empezando a llegar.

Pero los administradores de fincas también retoman sus ocupaciones habituales en la gestión de propiedades y comunidades, contabilidad de los inmuebles que administran, búsqueda soluciones para casos de morosidad, optimizar los recursos de las comunidades, gestionar los seguros, entre otros servicios.

Gestionar una comunidad es un trabajo arduo, que por suerte, lo hacen empresas especializadas en esa área, que con su experiencia y acertadas acciones siempre encuentran soluciones factibles para las necesidades de todos los propietarios.

Gracias a estas empresas administradoras, las comunidades pueden estar tranquilas, porque todo lo que sucede dentro de ellas está bajo el control de profesionales expertos en el área. Son una parte esencial, que ayuda a mantener todo en orden, desde la limpieza de las áreas comunes hasta la seguridad de los inmuebles, sin ellas todo sería más complicado para los propietarios.

En definitiva, hasta en el sector de la administración de fincas y comunidades también se puede ver una dinamización, principalmente en lo que se refiere al alquiler de propiedades vacacionales, que ya están siendo solicitadas otra vez por los habituales turistas de esta época. 

Nuevamente se empieza a ver el flujo de turistas que alquilan casas y pisos por temporadas, para disfrutar de las bellezas y los atractivos de la Costa del Sol. Todo forma parte del restablecimiento de la economía en esta nueva realidad impuesta por la pandemia de la Covid-19, que mientras el Coronavirus siga latente se deben mantener ciertas medidas, pero con más conciencia y flexibilidad para convivir con la enfermedad, sin contagiarse y sin perderse de todo lo bueno que ofrece la vida.

La Costa del Sol es una de las regiones más turísticas de España, que tiene mucho para ofrecer, y los turistas ya no aguantan las ganas de regresar para disfrutar de todo lo que se perdieron durante tanto tiempo de confinamiento. Cada día crece más la afluencia de visitantes y comienza a parecer nuevamente a la zona turística que es, y que por un tiempo dejó de ser.

Hay indicadores positivos, como el turismo, la construcción y el alquiler de bienes inmuebles, que evidencian una clara recuperación de la economía en Málaga, y principalmente en Marbella, que igualmente se puede percibir en otras regiones del país, del resto de Europa y de todo el mundo en general. 

Hay una nueva realidad a la que la sociedad se está adaptando progresivamente, para salir adelante y recuperar todo lo perdido, con sus limitaciones pero siempre avanzando.