La sombra de Cossío nunca se alejó de los pasillos de la gobernación, parecería que su sombra sigue recorriendo el edificio de la institución y cada que se pronuncia una Resolución como la del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), parecería alentar sus deseos de retornar a retomar la silla que le fue suspendida un Diciembre de 2010.
La Resolución del TCP, prácticamente dio muerte a la figura de desacato en la ley 004 Marcelo Quiroga Santa Cruz, con lo que se provocó un Tsunami Legal en el país (Estado Plurinacional), haciendo frotar las manos de varios políticos que estaban siendo perseguidos por algo menos de lo que significa un delito común y corriente. En este caso, Mario Cossío alienta sus esperanzas que nunca se enfriaron, por lo que nunca tomó la decisión de renunciar a su cargo, dejando la posibilidad de consolidar a Lino Condori en el cargo, pero también a la espera de una decisión como la que se pronunció por medio del TCP.
La sola impresión del retorno de Cossío seguramente provoca cosquilleos en muchos de los integrantes de la actual estructura de gobierno departamental, haciendo que muchos se tomen de las sillas con mucha fuerza, pero al parecer esta figura legal no le ofrece ninguna posibilidad al gobernador suspendido.
Por eso debemos referirnos al deceso jurídico del desacato, dando a conocer que ocurrió hace más de un mes, el pasado 20 de septiembre, pero, en una sintomática muestra de hermetismo poco democrático, la noticia fue retenida por el poder hasta el momento oportuno.
Es decir, hasta la posesión del nuevo Fiscal General, tratando de mostrar que sí hay independencia en la administración de justicia, con el objeto de aplacar las críticas suscitadas por la designación de un ex constituyente oficialista para el cargo mencionado.
Pero si el desacato ha muerto, promete resucitar al tercer día, vistas las declaraciones del vicepresidente Álvaro García Linera, quien desde la Universidad de Córdoba en Argentina -donde recibió uno de esos doctorados “honoris causa” que suelen entregarse por afinidades ideológicas-, dijo que no se permitirá que se difame a los funcionarios de gobierno, por lo cual se creará una figura sustitutiva que permita penalizar a quienes “injurien a una autoridad”.
Dicho y hecho tal como se prepara la figura llega la ley y posteriormente la resolución, a partir de esta instancia desde luego se tendrá que observar cuales van a ser los artilugios que usara el gobierno para mantener su poder sobre la oposición, porque la ley 004 tenía ese trasfondo político en sí.
Por eso el vicepresidente Álvaro García Linera, afirmó este jueves que el siguiente año cuando la Asamblea Legislativa redacte otro Código de Penal, se incluirán nuevas figuras penales para sustituir el delito de desacato, recientemente eliminado por un fallo constitucional.
En el marco del respeto a la decisión de un tribunal constitucional de la máxima autoridad del ámbito judicial, como personas y como autoridades vamos a utilizar otras figuras legales para defender la magistratura del Estado. Queda hacia futuro que la Asamblea elabore un nuevo Código Penal (…), que tenga las figuras en el marco del respeto a la libertad de opinión, en el marco del respeto a la libertad de pensamiento, pero también de sanción a quienes mientan o injurien a una persona, o, una autoridad, eso será yo creo al siguiente año que habrá un Código Penal, dijo el presidente.
Entonces que queda?… solamente esperar el año que viene para que se confirme la resurrección del desacato.